No eran agradables las noticias que aguardaban a Franco cuando el jueves llegó al trazado de 5281 metros donde se correrá a 58 vueltas. Así como no hubo un anuncio oficial sobre el comienzo de las negociaciones llevadas a cabo entre Williams y Red Bull y entre Alpine y Williams, apenas alusiones a un serio interés, tampoco habrá un comunicado oficial del cierre de esas tratativas. La pista “caliente” que se daba por segura en el fin de semana de Qatar, el paso de Colapinto al área Red Bull, apoyado por sus patrocinadores de origen argentino pero con empresas internacionales de gran envergadura detrás, se enfrió rápidamente hasta congelarse.
Flavio Briatore, el jefe virtual del equipo Alpine, ya había sido cortante en los boxes de Losail: “No”, le contestó rotundo a este cronista cuando se le preguntó si seguía hablando por Franco. Sin embargo, el mismo Briatore le filtró a un grupo de periodistas italianos que iba a probar al australiano Jack Doohan, que debutará este fin de semana con el coche que era del francés Esteban Ocon. Doohan tiene contrato por seis meses y, si no funciona de acuerdo con las exigencias de Briatore, Colapinto tendría su oportunidad en la casa francesa.
En la semana eran públicas y muy sugerentes las declaraciones del doctor Helmut Marko, asesor de Red Bull, sobre el muchacho argentino: “Tendremos una reunión después de la carrera de Abu Dhabi para hablar sobre los pilotos de 2025 y Colapinto no está muy alto en nuestra lista de prioridades”. Por otra parte, se supo que en el equipo satélite Racing Bulls se preparan para recibir a un conductor que no es Franco y que ya actúan en las medidas de la butaca. Elfrancés Isaac Hadjar, miembro de la academia Red Bull que se juega el campeonato en la fecha final de la Fórmula 2 en Abu Dhabi este fin de semana, espera en el carril lateral.
Liberar una plaza en Racing Bulls puede implicar que Liam Lawson sea compañero de Max Verstappen, ya que el miércoles próximo se anunciaría la salida de Sergio Pérez. Las fuentes argentinas que se mantenían en la secuencia Colapinto afirmaban que las declaraciones por parte de Red Bull eran una táctica negociadora y que, al concretarse la operación, el impacto sería mayor si se redujesen las expectativas y Colapinto pasase directamente a Red Bull. Como sea, ya hay un hecho en la escudería hermana, Racing Bulls: preparar el coche del 2025 para el próximo piloto.
El jueves previo a cada gran premio se suele hacer una conferencia de prensa a la que concurren, obligados por el reglamento, ciertos pilotos designados por FIA. En esta ocasión les tocó a Franco Colapinto, Max Verstappen y Nico Hülkenberg, justo quien inició el domingo pasado en Losail la carambola que terminó con Esteban Ocon y el argentino fuera de la pista, con su Alpine y su Williams golpeados.
El 90 por ciento de las preguntas fue dirigido a Verstappen y apenas dos o tres a Hülkenberg y Colapinto. Después de tres carreras en las que protagonizó accidentes, Franco intentaba ser positivo: “Quiero finalizar el año por lo alto. El equipo lo merece. Es importante para todos nosotros. Las últimas tres carreras fueron muy duras, pero creo que juntos podemos recuperarnos, ser más fuertes y tener un buen fin de semana”, respondió.
Hace un año, no más, Colapinto era un piloto de Fórmula 3 que tenía aspiraciones de ascender a Fórmula 2 y al que le dieron la oportunidad de rodar en una práctica de gran premio, como este año lo hará el joven británico Luke Browning con el chasis de Alex Albon. Y continuó Franco: “Sí, ayuda conocer el circuito. Por supuesto, al tener tres sesiones de entrenamientos, tratamos de mejorar en cada detalle. Aparte de Monza, éste el único circuito al que conozco de antemano. Así que espero algo mejor; ya estoy impaciente por comenzar a girar mañana”.
Franco observaba fijamente a Verstappen, que se refirió con duras palabras a su rival George Russell, muy disgustado por el comportamiento que, según él, tuvo el británico de Mercedes en una reunión ante comisarios de FIA en la que se le sancionó con la pérdida de una posición en la parrilla de largada por, supuestamente, haber obstaculizado la marcha de Russell durante la prueba de clasificación de Qatar.
A Colapinto no le ha tocado todavía enfrentarse directamente en la pista con el cuatro veces campeón, y seguramente Franco desea hacerlo. El rendimiento del Williams FW46 que utilizará este fin de semana no le permitiría presentarle batalla. Ese final de temporada por lo alto que él anhela implicaría poder enfrentarse mano a mano con algún Racing Bulls (el de Lawson o el de Yuki Tsunoda) o algún Haas (el de Hülkenberg o el de Kevin Magnussen).