En al menos cuatro ocasiones desde 2019, Musk ya predijo que su compañía pronto comenzaría con los ensayos en humanos de sus implantes cerebrales con el objetivo de tratar afecciones intratables como la parálisis y la ceguera.
Pero la empresa, fundada en 2016, no había solicitado la aprobación para empezar con las pruebas hasta principios de 2022.
La aprobación por parte de la FDA significa la luz verde para que la empresa de Elon Musk empiece a estudiar la manera de implantar en humanos sus dispositivos.