El último encuentro de ellos es muy reciente, aunque dentro de un contexto amistoso. El 21 de agosto pasado, Juan Martín practicó en el estadio Arthur Ashe con el balcánico. Y aquella la noche, Delpo disputó una exhibición junto a Gabriela Sabatini, la campeona del US Open 1990. Del Potro, alejado del circuito ATP desde febrero de 2022 luego de varias lesiones y cirugías, reapareció en el court principal del Abierto de Estados Unidos, el último Grand Slam del año, y recibió una ovación del público. Distendido y sonriente, ingresó junto al actual número 9 del mundo y reciente ganador de la medalla dorada en singles en los Juegos Olímpicos París 2024. Nole fue, además, el que derrotó al tandilense en el partido decisivo de Flushing Meadows 2018, cuando Juan Martín procuraba su segundo título de campeón allí. En rigor, tres veces se midieron en ese certamen, y en todas ganó el europeo.

Además de practicar juntos, dialogaron y sonrieron con complicidad en sus sillas, mientras los asistentes ponían las miradas en cada movimiento de ellos. Los golpes, los gestos, las bromas, las señas. Los teléfonos móviles apuntaban una y otra veces hacia ellos para retratar fotos o tomar videos. Para el álbum de los recuerdos inolvidables.

Al final, hubo un abrazo, una breve charla entre ellos en la red, y volvieron a surgir sonrisas. Como si el serbio estuviera proponiendo al argentino que evaluara un regreso al circuito por mantener intacta la calidad de los golpes. Entre muchas fotos, hubo una revelación del tandilense: “Me hizo llorar el otro día cuando ganó la medalla de oro. Fue el primer partido de tenis en el que lloré”.

El 24 de noviembre de 2013, Djokovic había visitado por primera vez la Argentina para enfrentarse a Rafael Nadal en la Rural de Palermo, Entonces, el mallorquín sacó a relucir sus pergaminos que lo erigían como el mejor del planeta y le ganó al serbio, su escolta entonces en el ranking mundial, por 6-4 y 7-5 un duelo que mezcló en dosis iguales tenis de alto vuelo y el típico show que caracteriza a las exhibiciones. La cita fue presenciada por unas 12.000 personas que soportaron en forma estoica el calor agobiante que imperó en el escenario especialmente construido para la ocasión en el predio de La Rural, en el barrio de Palermo, y que cerró la gira de ambos tenistas por Sudamérica.

Pero en el mismo evento, tanto Djokovic como Nadal disputaron un dobles con Juan Mónaco y David Nalbandian, que sirvió como despedida para el cordobés. Allí, el serbio desplegó todo su histrionismo, como cuando se disfrazó de médico para “atender” al Rey David en un pase de comedia de aquel encuentro amistoso. En su buen feeling con la Argentina, Nole recibió entonces un carnet como socio de San Lorenzo y visitó la Bombonera para ver un partido de Boca junto con Nadal.

“Tengo un sueño. Quiero jugar en Argentina mi último partido y me encantaría que vengas”, le dice Del Potro a Djokovic durante el video de la promoción de la exhibición en Buenos Aires. “¿Me estás cargando? Obvio que voy. Para ti, en Argentina. Por supuesto que sí”, le responde Nole. “Gracias”, cierra Del Potro, que encarará el partido como una suerte de celebración final en su carrera.

FUENTE: LA NACION.