Aston Villa no sufría en su arco y había estado cerca de aumentar la diferencia. Pero un pelotazo desde el otro campo encontró a Dibu vulnerable. El jugador de la selección argentina fue a buscar la pelota mientras retrocedían sus compañeros y quedó a mitad de camino, mientras el belga Lois Openda aparecía por detrás de los defensores para cambiar la dirección del balón y definir con el arco vacío.
Martínez, que había salido del arco y se vio sorprendido por su adversario, pronto dio señales corporales de hacerse cargo del error. Un saltito de fastidio, el lamento en insulto lanzado al aire y la mirada incómoda. Fue el 1-1, el resultado con el que concluyó el primer tiempo.
En el inicio de la segunda etapa, el colombiano Jhon Durán volvió a darle la ventaja a los Villanos con un golazo. Tras ingresar luego del entretiempo por Watkins, el delantero participó del armado de la jugada en el círculo central, se ofreció como variante por derecha para un ataque rápido y remató desde afuera del área para convertir por encima del arquero, que se lamentó por errarle al intento de despejar con una mano. El 2-1 acercaba al Aston Villa a la clasificación.
El propio Durán había logrado anotar minutos después nuevamente, pero Matty Cash estaba unos centímetros adelantado cuando recibió el pase, antes de asistir al goleador, y el VAR advirtió al árbitro para anularlo.
La respuesta de Leipzig a otro avance frustrado del equipo inglés fue el 2-2. Otro pelotazo desde el otro campo encontró a la defensa de Aston Villa adelantada al filo del mediocampo y a Openda habilitado por leve margen en su ruta hacia Dibu. No obstante, el belga retuvo la pelota, desairó a dos marcadores y lanzó un centro al área perfecto que conectó de aire Christoph Baumgartner para colocarla junto al segundo palo y sentenciar el empate, sin que Martínez pudiera hacer algo por evitarlo.
Gulacsi evitó dos veces el tercero de los visitantes en acciones consecutivas con dos salvadas bárbaras, desviando al córner dos remates que iban camino a los ángulos. Del otro lado, en los minutos finales, Openda tuvo otro regalo de la defensa de Aston Villa para darle el éxito a los bávaros, pero quiso resolver de primera y encontró atento a Dibu para quedarse con la pelota.
A cinco del final, un desvío le llevó alegría a Dibu y compañía otra vez, con el 3-2. Ross Barkley probó desde afuera del área, cayéndose, su remate dio en el cuerpo de Lukas Klostermann y desairó al arquero, que quedó a contrapierna y no pudo evitar el gol.
Cerca de la hora, Dibu apareció en dos avances de los locales para ponerle el cuerpo a dos atajadas claves. Primero, al sacar al córner una definición mano a mano en la que le achicó al delantero. Enseguida, al tapar con una pierna un disparo al medio del arco a la salida de un tiro de esquina.
Fueron una compensación de aquel error para mantener el triunfo y sostenerse Aston Villa en la zona de clasificación directa a los octavos de final.