Tal como vemos en las imágenes, el equipo se parece a los cascos de realidad virtual que se colocan en el rostro. En este caso, el usuario debe llevarlo puesto en su frente, por encima de los ojos. En la sección delantera de DotLumen, hay seis cámaras con tecnología de visión artificial, tres de ellas para monitorear el campo cercano y las tres restantes apuntan más lejos en el entorno. De acuerdo a la fuente, este sistema se inspiró en la configuración de los vehículos Tesla, la automotriz de Elon Musk.
En la parte trasera del equipo, se encuentran la batería y las tecnologías necesarias para el procesamiento, manteniendo de esa forma el equilibrio de un dispositivo que es voluminoso.
La principal función de DotLumen es la prevención de colisiones. La clave de esta característica son los pequeños componentes del casco que hacen contacto con la frente, cada uno de ellos vinculado a un motor háptico. Cuando el usuario siente los movimientos en el centro de la frente, sabe que puede seguir avanzando; pero cuando las vibraciones fluctúan hacia los lados, debe girar.
A esa información, el dispositivo añade indicaciones de voz (una guía con audio) para comunicarle al usuario aspectos del entorno. Por ejemplo, dice “estrecho” cuando el camino tiene esa característica.
El producto tiene una autonomía de dos horas y media, y se recarga a través de una ranura USB-C.
DotLumen: precio y fecha de lanzamiento
En el stand del fabricante en CES 2025, representantes anticiparon que prevén comerciar esta tecnología de accesibilidad en un “futuro cercano”, sin brindar mayores precisiones al respecto.
En los mercados europeos, se ofrecerá por 10.000 euros. Es una cifra elevada, aunque Engadget comenta al respecto que, al menos en Estados Unidos, para entrenar a un perro guía hay que destinar mínimamente 50.000 dólares.