Su curiosidad lo llevó a investigar más. Buscó libros, buceó por internet, encontró videos... Su pasión era tanta que su familia le consiguió un profesor particular de Física. Así, el “profe Fede”, le abrió las puertas a conceptos avanzados. Pero al poco tiempo, su mentor tuvo que mudarse a Alemania. La partida de su maestro no lo detuvo: “Decidí seguir con los libros y los videos”, dijo con determinación.
La necesidad de compartir su conocimiento y entusiasmo lo impulsó a crear Jano Quantum, su cuenta de Instagram, y un canal de YouTube junto a su familia. “Quería explicar a la gente lo que a mí tanto me encanta: la física cuántica, la ciencia, la música”, contó a TN Tecno. Y allí explotó a la divulgación científica.
Actualmente, tiene casi 46.000 seguidores y comparte los libros que lee, explica términos tecnológicos, sube videos de sus charlas (participó de una TEDex), responde preguntas y enseña física.
Sin dudas, lo que más llama la atención de Jano y sus videos, además de su corta edad, es la claridad con la que explica estos temas tan complejos. La clave está en la naturalidad y sinceridad con la que habla. Y su pasión por las ciencias y las artes, que lo acompañan desde muy pequeño, hace que todo lo que explica parezca sencillo. El video que ilustra esta nota, en el que Jano explica qué es la física y la computación cuánticas, son un perfecto ejemplo.
Sus otras pasiones y sueños
“La música fue mi primer gran interés”, recordó Jano. “En mi casa se escucha mucha música, por lo que me siento muy conectado con ese mundo. Ese amor me llevó a investigar los órganos de tubo. Y cuando por fin pude ver uno, me encantó”, reveló el joven, que además estudia y toca el clarinete.
Dioses griegos, el océano y la astronomía son algunas de las otras materias que Jano lee e investiga. “También me interesa la química. Y estoy muy metido con la mineralogía, que es el estudio de los minerales. Tengo una gran colección de ellos. Están todos en cajas, tienen nombre y están ordenados”, comentó con orgullo Jano. “Y ahora me está interesando la geografía”, adelantó.
Uno de los sueños de Jano es realizar un descubrimiento significativo en el campo de la física. “Me encantaría descubrir una partícula nueva porque podría ayudar mucho con la física de partículas”, afirmó. Sin embargo, para él, el reconocimiento no es lo más importante: “No me interesa ganar el premio Nobel porque para mí es más importante descubrir algo que ser reconocido por ello”. Esta perspectiva refleja una madurez poco común en alguien de su edad.
A través de sus palabras, Jano no solo comparte su amor por la ciencia, sino que también nos recuerda que la curiosidad y la pasión pueden llevarnos a explorar incluso los temas más complejos. Con su enfoque fresco e informal, este joven cordobés está demostrando que la física cuántica no es solo para científicos adultos: también puede ser entendida y explicada por un niño que simplemente ama aprender y compartir.