PINAMAR – El director de Relaciones Institucionales de Villa Gesell, Nahuel D’Aquila expresó en Nadie es Perfecto que “nosotros tenemos un registro que abrimos el 20 de marzo y sabemos que hay entre 600 y 700 personas que todos los días salen a trabajar”. A partir de esos datos “cuando detectamos que hay un positivo automáticamente aislamos a la gente que va a trabajar ahí, eso nos lleva a que haya mayor cantidad de gente aislada pero menor cantidad contagiada”.

El funcionario remarcó que “nos preguntaron desde el ministerio de Salud (de la provincia) por qué había tan pocos positivos habiendo una ciudad como Mar del Plata que está estallada y que tenemos mucha gente que va y viene, lo mismo que Pinamar que tiene una cantidad más importante”.

El propio ministerio envió la semana pasada “tres respiradores con lo que llegamos a armar 10 camas de terapia intensivas completas para Covid y comenzamos con los testeos permanentes que lo iniciamos en los barrios”.

“Empezamos por el barrio Las Praderas y vamos a seguir casa por casa”, describió D’Aquila, que agregó: “se llena una encuesta donde se evalúa si es necesario el testeo, te hacen una serie de preguntas y si es necesario se testea y se manda con un hisopado, no hay testeos rápidos”.

Acceso

Sobre los controles en el único acceso habilitado, indicó que “la única entrada es por la 139, lo venimos manteniendo desde el 20 de marzo. Nos guiamos por los DNU nacionales que son los que permiten poder circular. Los únicos certificados son aquellos por una cuestión de necesidad y urgencia extrema o por un problema serio en su casa de luz, gas o agua. Esos permisos son por 24 horas, pueden ingresar para solucionar un problema puntual y después deben irse de la Villa”.

También dijo que “tenemos reclamos todos los días, pero nosotros no podemos ir en contra de leyes nacionales o provinciales, no existe otro permiso de circulación que habilite a otra cosa que no sea lo que dice el DNU nacional”.

Por último, destacó que “ahora se volvieron a poner algunos retenes, pero el primer retén que tenían desde que salían de su casa en el AMBA éramos los ingresos a la costa, llegaban a la 139 sin que los parara nadie, estaban a 10 cuadras de su casa y a 20 del mar y somos nosotros los que tenemos que decirles que no pueden ingresar. Hay una decisión política del intendente municipal (Gustavo Barrera) y nosotros trabajamos en base a eso”.